En el pasaje de este domingo, vemos a Jesús realizar uno de los gestos más significativos de su tarea mesiánica: se compadece, se acerca y toca al leproso, mostrando así su preocupación por los que sufren, los que están cargados de dolor, de miseria y de rechazo. Jesús ve cómo este leproso se acerca a Él para pedirle la curación. Los leprosos en aquella época eran como “muertos vivientes” ya que estaban privados de cualquier tipo de vida social, familiar, de trabajo e incluso de la práctica de la religión. Eran absolutamente marginados del pueblo y no se podían acercar a nadie. Tenían que anunciar su llegada con una campanilla para que la gente se apartara y no poder así entrar en contacto con ellos. Jesús, que conocía la soledad, el dolor, la marginación de este leproso y todo lo que esto conlleva en la vida de una persona, le mira con compasión, abraza su dolor, lo hace suyo y no se queda indiferente, extiende su mano y lo toca para así, curarlo, para liberarlo de esa esclavitud a la que había estado sometido durante tantos y años y darle la posibilidad de volver a entrar en el círculo de la sociedad. Es por esta razón, siguiendo la ley (Lev 13-14), que le pide que vaya al sacerdote a contar, a dar testimonio de su curación, de lo que ha pasado, para que pueda recuperar la identidad como miembro del pueblo elegido de Dios. Y le pide otra cosa, que no diga nada de lo ocurrido fuera del sacerdote, que era el que debía ser informado. Esta petición, el leproso, no la pudo cumplir. Con grandes gritos y lleno de la alegría de la salvación, anunció por todas partes que estaba curado, haciéndose de este modo testigo del Reino en medio de todos aquellos que no le habían acogido durante tantos años. Hoy en día, en nuestra vida cotidiana, ¿quiénes son los “leprosos” que tenemos a nuestro alrededor? Quizá esta enfermedad en nuestro mundo de hoy no es algo que se distinga por las manchas en la piel, pero sí que podemos ver que siguen existiendo personas marginadas en nuestra sociedad a las que no dejamos entrar en nuestros círculos por miedos, sospechas, rechazos, marcados por las diferencias, por las ideologías, por gustos que quizá no concuerdan con los nuestros. Siguiendo los pasos de Jesús, pidamos la gracia de poder tener una mirada compasiva, una mirada que ve más allá de las diferencias y que es capaz de salir de sí misma para poder acercarse a los demás y acogerles, hacer nuestro su dolor, y ayudar a caminar en compañía de otros, no en soledad. Hagamos posible que nuestras manos se extiendan para poder tender puentes que salven toda distancia y así poder ser también nosotros testimonio en nuestro mundo de que es posible “que todos sean uno para que el mundo crea” (Jn 17, 21-23). Y también, en este domingo, entremos en nuestro corazón ¿cuál es nuestra lepra? ¿qué aspectos de nuestra vida son aquellos en los que le tenemos que pedir a Jesús que nos cure y necesitamos escuchar de su boca que nos dice “quiero, queda limpio”? Dejémonos tocar por la gracia de Jesús, abramos nuestro corazón a su paso, con humildad, poniéndonos delante de Él. Y aquellos que el Señor nos regale, no lo guardemos para nosotros, hagamos que los demás conozcan este Paso de Dios y puedan, de este modo, conocer, descubrir, que el Reino de Dios está entre nosotros, que la gracia de Dios es para todos, que Jesús no nos deja. Lecturas:
Lv 13, 1-2. 44-46 1 Cor 10, 31–11, 1 Mc 1, 40-45 Los comentarios están cerrados.
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TodosMateo1, 18-24 1, 29-39 3, 1-12 3, 13-17 4, 1-11 4, 12-23 5, 1-12a 5, 13-16 5, 38-48 9, 36—10, 8 10, 26-33 11, 2-11 11, 25-30 13, 1-23 13, 24-43 13, 44-52 14, 22-33 15, 21-28 17, 1-9 17, 1-9 18, 15-20 18, 21-35 21, 33-43 22, 1-14 22, 15-21 24, 37-44 25, 1-13 Mt 25, 14-15. 19-21 25, 31-46 27, 11-54 28, 16-20 Marcos
Lucas1,1-4; 4,14-21
1, 26-38 1, 39-56 2, 13-21 2, 16-21 3, 1-6 3, 15-16. 21-22 4, 1-13 4, 21-30 5, 1-11 6, 17. 20-26 6, 27-38 6, 39-45 9, 11b-17 10, 38-42 10, 25-37 11, 1-13 12, 13-21 12, 32-48 12, 49-53 13, 22-30 14, 25-33 15, 1-10 16, 10-13 16-19-31 17, 5-10 17, 11-19 18, 1-8 18, 9-14 19, 1-10 20, 27-38 21, 25-28.34-36 24, 35-48 24, 46-53 Juan
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Marzo 2024
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